domingo, 3 de octubre de 2010

¡FELIZ CURSO 2010 / 2011!


Comenzamos un curso nuevo, con todo lo que esto supone. Para algunos, la ilusión de conocer a nuevos compañeros, de aumentar sus conocimientos, de enfrentarse a nuevas experiencias, de acercarse un paso más al mundo de la Universidad, o del trabajo... Para otros, el fin de unas cómodas vacaciones, el fastidio de volver a tener que estudiar, esforzarse, dormir menos... Habrá quienes ni siquiera consideren que van a ocurrir cosas que valga la pena mencionar... Igual para la mayoría va a suponer un poco de todo...


Pero me gustaría ponerme un poco filosófico y ofreceros un comentario nada original, pero que por mucho que os lo hayan repetido dudo que nunca hayáis considerado en su justo valor: vivid este año, vividlo intensamente cada uno de sus días, de sus horas, de sus minutos... Porque cada uno de esos instantes es irrepetible, no volverá jamás. A vuestra edad tenéis una cierta tendencia a considerar que la vida es algo que está ahí, y que ahí va a seguir estando siempre, o casi; hay una especie de mezcla de fatalismo e indiferencia. Pero quisiera que reflexionáseis sobre el hecho de que la mayoría de las circunstancias que van a rodear vuestra futura vida de adultos van a depender de las decisiones que toméis en estos años críticos de vuestra formación.

Sé que comentarios de este tipo no son especialmente "guays" (¿se sigue diciendo así?), y que actitudes responsables, maduras y serias no son las que más se llevan en estas edades, y menos en estos tiempos, pero la excelente perspectiva de la situación de la que gozo después de 36 años viendo pasar generaciones de adolescentes por las aulas me anima, me obliga, casi, a intentar dar este toque de atención, aunque se quede básicamente en un brindis al sol.

¡Que disfrutéis, y si es posible, que os cunda!